Algunas curiosidades sobre el corzo que quizás aún no sabías
El corzo pertenece a la familia de los cérvidos que también recibe el nombre de corzo europeo y corzo occidental. Estos cérvidos son muy fáciles de identificar en las regiones de Europa y el Reino Unido porque son de tamaño medio, sin cola y con astas cortas en la cabeza.
En este post analizaremos en profundidad este animal para conocer sus costumbres, cómo se alimenta, dónde vive, etc.
¿Cómo es el corzo?
El corzo es un animal interesante ya que estos animales duermen con los ojos bien abiertos para protegerse de cualquier tipo de peligro. Es posible que veas sus ojos cerrados, pero es apenas durante cinco minutos, ya que sus ojos se encuentran siempre abiertos.
La razón puede ser que estas criaturas son la presa de los animales más grandes y por eso no se fían de nadie. Si el corzo huele o ve a los humanos es propenso a cambiar su zona de territorio y no vuelve a menos que se sienta libre de la amenaza humana.
Por lo demás, el corzo o cualquier otra especie de ciervo suele arraigarse en una zona, siempre que sea lo suficientemente segura y le proporcione acceso a comida y refugio. Estas áreas de distribución son las que normalmente llaman hogar.
¿Dónde vive?
El corzo occidental se encuentra en zonas boscosas de toda Europa, especialmente en Escandinavia, Escocia, Irlanda e Islandia. Aparte de las regiones boscosas, también se encuentran en el Bosque Rojo de Chernobyl.
El corzo prefiere hacer su hábitat en zonas abiertas como bosques, terrenos agrícolas, tierras de cultivo, brezales, bosques y praderas. Su lugar preferido es el bosque denso de coníferas, donde puede encontrar árboles y hierba con facilidad.
Los corzos machos, muestran un comportamiento territorial durante el verano, en julio y agosto, porque es su periodo de reproducción.
Comportamiento y ciclo de la vida
El celo, o temporada de cría, tiene lugar entre mediados de julio y mediados de agosto. Los machos se vuelven agresivos y mantienen territorios exclusivos alrededor de una o más hembras antes del celo.
Las peleas entre los machos pueden provocar lesiones graves o la muerte, y el ganador se apodera del territorio del perdedor o de la hembra que lo acompaña.
El cortejo implica la persecución entre el macho y la hembra durante algún tiempo hasta que la hembra está lista para aparearse.
Aunque el apareamiento se produce en este periodo, el óvulo fecundado no se implanta y crece hasta enero. Se cree que esto es una adaptación para evitar el parto durante los duros inviernos del norte.
El periodo de gestación es de nueve meses (cuatro meses sin crecimiento embrionario seguidos de cinco meses de crecimiento fetal) y las crías (normalmente dos o tres) nacen entre mayo y junio. Puede haber una gran mortalidad poco después del nacimiento y durante el primer invierno.
Los corzos no mantienen territorios exclusivos, sino que viven en áreas de distribución superpuestas. Los machos se aparean con varias hembras y también se ha observado que las hembras se aparean con varios machos.
¿Los corzos pierden la cornamenta?
Todas las especies de ciervos mudan su cornamenta cuando cambia el clima, es decir, en verano o en invierno. Estas criaturas prefieren mudar su cornamenta en la temporada de invierno, también se sabe que se desprenden de la cornamenta cuando termina el periodo de celo, que es en septiembre.
Los corzos más viejos son los primeros en mudar la cornamenta y este proceso continúa con todos los machos presentes en el grupo.
La última muda se realiza durante el mes de noviembre y el nuevo conjunto comienza a crecer de inmediato. Los corzos mudan su cornamenta una vez al año.
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Raul Solana Lorca
